13 feb 2008

A LO ZURITA

I
El amor de Chile, no fue el amor de Chile, sino que fueron los gritos sordos de las estrellas de mar que fecundaron las rocas de las costas de Chile.
Fueron los aullidos de los delfines con arenas en sus ojos, que treparon los prados de algas somnolientas en un cause remoto de tu nombre en los nombres, de los que no tuvieron nombre, y fueron huérfanos hasta no escuchar al unísono a la patria hablar desde sus entrañas en las marejadas ajenas que golpearon cada playa, cada puerto, cada marea espesa de peces agónicos.
II
El amor de Chile entonces, fue la espuma sulfurante, que recaló en las playas norteñas sin nombre, en sureñas ventiscadas que hoy son ciegos testigos de todos los hijos de la sal, de todos los hombres de las costas.
III
Y así el amor creció en las redes, y así Zurita no fue Zurita, sino que fue una Z en el abismo del abecedario Chileno, un rumor en las últimas páginas descalibradas del silabario de un niño sin nombre, debajo de los castillos de arena, entre los sueños de todas las criaturas marinas.

No hay comentarios: